DIMITRIS ARMAOS – FRAGMENTUM FIAT LUX

Traducción de Mario Domínguez Parra

FRAGMENTUM FIAT LUX

Y los libros tampoco ellos son nunca medio si nos referimos
Al espiritista de los estudios diríase y solamente
Enemigos juramentados algo así defienden clasistas y rostros peligrosos
Hay también claro está libros que conducen siempre y solo a libros
Escritos que conducen a las escrituras
Pero estas cosas las decían siempre libretas
Y de verdad las gentes estudian para aprender de cualquier forma
Un fácil comienzo cómo empieza alguien para poder
Alguna vez m a n e j a r libros como si su Gente fuera
Para concentrar sus escrituras después de todo en su propia biografía
Y estas cosas son todo su H o n o r lo demás deshechos
Los puercos lo confunden y no el tiempo.

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – DEL CAJÓN

Traducción de Mario Domínguez Parra.

DEL CAJÓN

Intención tenía de ponerla en una pared de mi cuarto.

Pero la estropeó la humedad del cajón.

En un marco no pondré esta fotografía.

Debí con más cuidado guardarla.

Estos labios, este rostro —
ah, que por un día solo, por una hora
solo, regresase su pasado.

En un marco no pondré esta fotografía.

Sufriré viéndola así, ajada.

Por otra parte, aun sin estar ajada,
me incomodaría advertir si acaso alguna
palabra, algún tono de voz delatase —
si alguna vez me preguntasen por ella.

[1923]


ΑΠ' ΤΟ ΣΥΡΤΑΡΙ

Εσκόπευα στης κάμαράς μου έναν τοίχο να την θέσω.

Αλλά την έβλαψεν η υγρασία του συρταριού.

Σε κάδρο δεν θα βάλω την φωτογραφία αυτή.

Έπρεπε πιο προσεκτικά να την φυλάξω.

Αυτά τα χείλη, αυτό το πρόσωπο —
α για μια μέρα μόνο, για μιαν ώρα
μόνο, να επέστρεφε το παρελθόν τους.

Σε κάδρο δεν θα βάλω την φωτογραφία αυτή.

Θα υποφέρω να την βλέπω έτσι βλαμμένη.

Άλλωστε, και βλαμμένη αν δεν ήταν,
θα μ’ ενοχλούσε να προσέχω μη τυχόν καμιά
λέξις, κανένας τόνος της φωνής προδώσει —
αν με ρωτούσανε ποτέ γι’ αυτήν.

[1923]

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – MEDIA HORA

Traducción: Mario Domínguez Parra

Ni te conseguí, ni te conseguiré
nunca, creo. Unas palabras, un avance,
como en el bar anteayer, y nada más.
No digo que no sea una pena. Pero a veces
los del Arte, con intensidad mental, y, claro, solo
por poco tiempo, creamos un deseo,
el cual casi como materia se aparece.
Así, en el bar, anteayer —ya con mucha
ayuda de la bondadosa ebriedad—
poseí media hora perfecta, erótica.
Y lo entendiste, a fe mía,
y te demoraste algo más adrede.
Esto fue una gran necesidad. Porque,
con toda la fantasía y con el alcohol brujo,
necesitaba ver también tus labios,
necesitaba que tu cuerpo cerca estuviese.

[1917]

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – EN EL 200 A.C.

Traducción de Mario Domínguez Parra

«Alejandro, hijo de Filipo, y los griegos, salvo los lacedemonios» —

Muy bien podemos imaginar
la absoluta indiferencia que en Esparta mostrarían
por esta inscripción. «Salvo los lacedemonios»;
pero claro que sí. No estaban los espartanos
para que los condujesen y les dieran órdenes
como a valiosos servidores. Además,
una campaña panhelénica sin
un rey espartano por cabecilla
no les parecería de gran prestigio.
Ah, de lo más certero: «salvo los lacedemonios».

También es esta una posición. Se siente.

Por tanto, salvo los lacedemonios en el Gránico;
y en Issos luego; y en la batalla
decisiva, donde fue aniquilado el tremendo ejército
que los persas reunieron en Gaugamela:
que de Gaugamela partió hacia la victoria y que fue aniquilado.

Y de la milagrosa campaña panhelénica,
victoriosa, resplandeciente,
célebre, glorificada
como ninguna antes se glorificó,
sin par, surgimos nosotros:
nuevo mundo griego, grande.

Nosotros los alejandrinos, los antioquianos,
los seléucidas y los numerosos
y restantes griegos de Egipto y Siria,
y los de Media y los de Persia y todos los otros.
Con los extensos dominios,
con la diversa acción de las adaptaciones reflexivas.
Y el habla griega común
hasta el interior de la Bactriana llevamos, hasta la India.

¡A hablar vamos ahora de lacedemonios!

[152, 1981]

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – VINO A LEER –

Traducción de Mario Domínguez Parra

Vino a leer. Hay abiertos,
de historiadores y poetas, dos, tres libros.
Pero, tras diez minutos de lectura,
lo dejó. En la cama turca
está medio dormido. A los libros de pleno pertenece –
pero tiene veintitrés años y es muy bello;
y la pasión sometió hoy por la tarde
su ideal carne, sus belfos.
Su carne, que es toda beldad,
el ardor erótico sometió;
sin un pudor ridículo por la forma del goce…

[1924]

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – EL HOMBRO VENDADO

Traducción: Mario Domínguez Parra


Dijo haberse dado con una pared o caído.
Pero es posible que otra fuese la causa
del hombro herido y vendado.

Tras un movimiento un tanto brusco, 
para bajar de un anaquel algunas
fotografías que quería ver de cerca,
el vendaje se soltó y brotó algo de sangre.

Volví a vendarle el hombro y en vendarlo
tardé algo; porque no le dolía
y me gustó ver la sangre. Parte
de mi pasión aquella sangre era.

Cuando se fue hallé en la silla, delante,
un guiñapo ensangrentado de tela,
guiñapo que parecía listo para la basura;
y que me llevé a los labios,
y que guardé durante horas –
la sangre de la pasión sobre mis labios.

[1919]

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – DÍAS DE 1903

Traducción: Mario Domínguez Parra


Ya no los volví a hallar – los que tan raudo perdí…
los ojos poéticos, el rostro
tenue… en el anochecer de la calle…

No los hallé – los que plena, afortunadamente gané,
a los que así de fácil renuncié;
y que después con desazón deseé.
Los ojos poéticos, el rostro tenue,
los labios aquellos ya no volví a hallar.

[1917]

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – DICIEMBRE DE 1903

Traducción: Mario Domínguez Parra

Y si de mi pasión no puedo dar cuenta —
si no hablo de tus cabellos, labios, ojos;
empero, tu rostro, que guardo en mi alma,
el sonido de tu voz, que guardo en mi mente,
los días de septiembre, que amanecen en mis sueños,
mis palabras y mis frases moldean y modulan
en cualquier tema que transito, en cualquier idea que expreso.

[1904]


Ο ΔΕΚΕΜΒΡΗΣ ΤΟΥ 1903

Κι αν για τον έρωτά μου δεν μπορώ να πω —
αν δεν μιλώ για τα μαλλιά σου, για τα χείλη, για τα μάτια·
όμως το πρόσωπό σου που κρατώ μες στην ψυχή μου,
ο ήχος της φωνής σου που κρατώ μες στο μυαλό μου,
οι μέρες του Σεπτέμβρη που ανατέλλουν στα όνειρά μου,
τες λέξεις και τες φράσεις μου πλάττουν και χρωματίζουν
εις όποιο θέμα κι αν περνώ, όποιαν ιδέα κι αν λέγω.

[1904]

DIMITRIS ARMAOS – LINDE DE LO VIVIENTE

Traducción de Mario Domínguez Parra

[  14  ]
LINDE DE LO VIVIENTE

Iniciación también es cuando
Dos miradas hermanas se zahieren

Fuera del altar
Inocente ninguna.

[  14  ]
ΟΡΙΟ ΤΟΥ ΖΩΝΤΟΣ

 Μυσταγωγία εἶναι κι ὅταν 
 Δυὸ ἀδελφὲς ματιὲς ἀλληλοσφάζονται

῎Εξω ἀπὸ τ᾿ ἅγιο βῆμα
 Ἀθώα καμιά.

KONSTANTINOS P. KAVAFIS – EL FINAL DE ANTONIO

Traducción de Mario Domínguez Parra

EL FINAL DE ANTONIO

Pero, cuando oyó a las mujeres llorar
y plañir por su infortunio,
con gestos o cirios orientales,
y a las esclavas con su griego barbarizante,
el orgullo dentro de su alma
alzóse, su sangre itálica asqueóse
y parecióle extraño e indiferente 
lo que hasta entonces enceguecido adoraba
–toda su ardiente vida alejandrina–
y dijo: «Por él no lloren. Conveniente no es.
Pero encomiarlo se debería quizá,
por haber sido un gran gobernante
y por haber adquirido tantas y tantas riquezas.
Y si ahora muere, modesto no muere,
sino como romano por romano vencid[o]».

[1907]


ΤΟ ΤΕΛΟΣ ΤΟΥ ΑΝΤΩΝΙΟΥ

Αλλά σαν άκουσε που εκλαίγαν οι γυναίκες
και για το χάλι του που τον θρηνούσαν,
με ανατολίτικες χειρονομίες η κερά,
κι οι δούλες με τα ελληνικά τα βαρβαρίζοντα,
η υπερηφάνεια μες στην ψυχή του
σηκώθηκεν, αηδίασε το ιταλικό του αίμα,
και τον εφάνηκαν ξένα κι αδιάφορα
αυτά που ώς τότε λάτρευε τυφλά —
όλ’ η παράφορη Αλεξανδρινή ζωή του —
κι είπε «Να μην τον κλαίνε. Δεν ταιριάζουν τέτοια.
Μα να τον εξυμνούνε πρέπει μάλλον,
που εστάθηκε μεγάλος εξουσιαστής,
κι απέκτησε τόσ’ αγαθά και τόσα.
Και τώρα αν έπεσε, δεν πέφτει ταπεινά,
αλλά Ρωμαίος από Ρωμαίο νικημένο[ς]».

[1907]